Ganar sufriendo

Se hizo esperar, la anhelada primera victoria en este Torneo Clausura 2008. Después de sufrir dos empates consecutivos, y los dos sobre la hora, el verde pudo volver al triunfo. Lo hizo venciendo por cuatro tantos contra a dos a un durísimo Buba de gala, en un clásico que, ha falta de un juego prolijo y atildado, contó con la entrega inclaudicable de los contendientes que no se guardaron nada.
Ambos conjuntos se entregaron a un ida y vuelta desordenado, que dio como resultado un match intenso y emotivo. El verde intento tener la pelota, pero Buba le gano de mano. Verdes y azules generaron peligro en los dos arcos. Sin tener la posesión de la bocha, el escuadrón esmeralda fue más incisivo. Como hace un año, en el encuentro por la décima fecha del Apertura 2007, la actuación del Pelado Peluffo fue vital para soportar los ataques manzistas. Pese a las intervenciones del guardavalla, dos raptos de lucidez le dieron a Manzi la ventaja de dos goles, minutos antes del entretiempo.
El comienzo de la segunda mitad trajo estupendas noticias para Manzi. Javi hizo un endemoniado dribbling sobre el extremo derecho de la cancha, se metió en el área y sacudió la red con un tiro bajo y cruzado. El tres a cero transitorio coincidió con el mejor momento del equipo en el partido. Las situaciones de gol se sucedían una tras otra. Y una tras otra, el monumental Pelado Peluffo se encargaba de conjurarlas y mantener con vida a los azurros.
El verde dejo pasar el tren. Entonces, de merodear la goleada paso, sin escalas, a sostener desesperadamente la mínima diferencia. Buba se jugo la heroica y sin ser un dechado de claridad, encontró dos goles que lo pusieron a tiro del empate. A Manzi no le quedo otra que plantarse atrás y aguantar el chubasco.
Fueron minutos de angustia para el escuadrón esmeralda. Por ímpetu e insistencia, el empate azurro parecía inevitable. Por suerte para los corazones verdes, Javi aprovecho un mal pase y batió al arquero rival, poniendo el tranquilizador (y ahora si definitivo) 4-2.
Era vital empezar a sumar de a dos. Sin jugar todo lo bien que puede hacerlo; Manzi, con esta victoria frente a Buba, apunto la proa hacia un nuevo objetivo. Todo indica que será un campeonato reñido y muy parejo, donde cada punto valdrá oro al momento del recuento final. Es deber del verde entonces, mantenerse firme y digno en los puestos de vanguardia, luchando (dejando el alma en cada jugada) por volver a alcanzar un nuevo destino de gloria.
Aguante Manzi carajo!!!