Adiós campeonato, adiós

El impulso virtuoso y ganador que nos llevo a ganar el Apertura 08 y ser animadores de la primera mitad del torneo en curso, parece haber llegado a su fin. La tercera derrota consecutiva, esta vez a manos del ahora líder absoluto, Reyes Magos, destruyo por completo la ilusión de pelear por el título. Si bien las matemáticas avalan una diminuta posibilidad, la realidad indica todo lo contrario. Aún en el caso de una levantada mágica y un sprint final digno del Libro Guinnes, dependemos de resultados ajenos.
El triunfo contra Zinny (7º fecha) fue nuestro techo de rendimiento. A partir de ahí, perdimos, en poco menos de un mes, solidez defensiva, capacidad goleadora y, sobre todo, temple. Nos hacen más goles, nosotros generamos poco y lo que generamos no lo cambiamos por gol. Pero lo más importante, perdimos la calma. Hace poco, sabíamos como manejarnos en desventaja y de esa manera hemos dado vuelta, valiosos partidos que nos llevaron a obtener el título. Ahora, los nervios se apoderan del equipo a la mínima contrariedad. Consecuencia, fallamos atrás, fallamos adelante y para colmo, nos excedemos con algunas brusquedades muy poco dignas, que dejan una imagen desteñida de nuestra gloriosa escuadra.
Reyes fue un justo ganador. El primer tiempo fue parejo y ninguno saco grandes diferencias en el juego. Sin nuestros dos mejores valores (Martín y Javi), hicimos una decente primera mitad. La diferencia entre ambos equipos sólo la marco el oportunismo del conjunto mago para convertir dos de sus tres chances. Nosotros, padecimos nuestra falta de profundidad y, cuando al fin lográbamos afinar la puntería, la presencia de Diego Figueroa en la valla.
El complemento si, fue todo color azul. Ni siquiera el temprano descuento de Rodri (a los 55 seg.) logro torcer el destino del partido. El conjunto mago se hizo dueño de la pelota y no delego nunca ese privilegio. Extrañamente, el verde (nosotros) en lugar de salir a disputar esa tenencia, se dedico a esperar. La gran pregunta fue ¿esperar qué? No hay respuestas para este interrogante. Si puedo decir que hubo, de a ratos, destellos de las peores épocas del escuadrón esmeralda.
A cada amague de recuperación de nuestra parte, Reyes respondió con un gol que mantenía la distancia. Valiéndose de su circulación, y nuestros regalos defensivos, los de casaca azul también fueron ampliando esa distancia. La roja a Rodri termino por sintetizar la impotencia de todo el equipo.
Faltan cinco fechas. El clásico con Domingo 4 tiene que ser el comienzo de la levantada. Tenemos que ganar, no hay muchas alternativas. Porque es el rival de toda la vida, el clásico con más antigüedad de Centenera, porque la última vez que nos enfrentamos nos ganaron, y por que, para agregarle más sabor a la cosa, es un competidor directo en la lucha por el ascenso. Gente, la siesta se termino. Ya es hora de despertarse.
Aguante Manzi carajo!!!