¿Qué sera de ti, viejo Manzi?

La promoción por la permanencia parece ser el inevitable destino final para el viejo y glorioso Manzi F. C. en este Clausura 2009 al que sólo le restan dos capítulos para llegar a su desenlace. Otra vez con un plantel recortado, un clásico ya y no es excusa, el verde cayo por goleada ante Zambá por la décimo quinta fecha del campeonato.
Aún cuando las matemáticas brindan el calor de una muy mínima esperanza, cuatro puntos por disputarse, dos de diferencia con Recovecos (que por ahora zafa), enfrentamiento con un rival directo (Monserrat) la semana que viene, la realidad indica que Manzi, hoy por hoy, no esta para hazañas. Rendirse, no esta de más decirlo, no es opción. Pero hay que empezar a preparar las armas para revalidar la categoría contra un equipo de la “C”.
Sin cambios, sin resto físico y, sobre todo, sin fútbol, la versión que el verde presento en cancha para enfrentar a Zambá tuvo en su inagotable amor propio, el único argumento para oponerle a su rival. Esta claro que no alcanzo.
En el principio, ambos equipos se repartieron la pelota y las imprecisiones. Sin atacantes vocacionales, al escuadrón esmeralda le costo una enormidad generar riesgo. Pese a tener jugadores de buen manejo los de camiseta verde tampoco contaron con chances claras de convertir.
El quiebre en la paridad empezó a marcar el quien es quien del encuentro. Zambá abrió el marcador y un minuto después, lo empato Manzi por intermedio de Pancho. A los pocos segundos los de camiseta verde volvieron a adelantarse en el marcador y empezaron a cimentar su merecida victoria. Dos goles más antes del final del primer tiempo, les otorgaron la seguridad de un asunto casi definido.
Así, la segunda mitad fue un monologo del vencedor del partido. Zamba estiro a tres la diferencia apenas comenzada la etapa. La muchachada manzista recupero un poco la compostura con el descuento, pero el aire le duro poco. Su rival se dedicó a hacer correr la pelota, y aprovechando las facilidades brindadas por un equipo extenuado y sin variantes, para terminar obteniendo la exagerada diferencia final.
La posibilidad de escapar de la promoción ya casi se esfumo. Queda ahora afrontar los dos partidos que quedan para que termine el torneo. Buscar un par de victorias que permitan soñar con un milagro, que depende de terceros, y que, en última instancia, posicionen a Manzi lo más arriba posible, a la espera del oponente con el que se definirá en que categoría arrancará el escuadrón esmeralda el 2010.
Aguante Manzi carajo!!!