Juventud, divino tesoro

Oscuros nubarrones comienzan a ennegrecer el horizonte del viejo y glorioso Manzi F. C., que, por la tercera fecha del Torneo Centenera Clausura 2009, cayó por goleada frente a Pompeya Fútbol. El abultado resultado deja en claro que la experiencia y la voluntad del verde no fueron argumentos suficientes para hacerle frente al buen juego y estado físico del joven equipo de rival.

De ante mano se sabía que iba ser un fin de semana complicado. A las ya conocidas bajas de Nacho y Juli, se sumaron las ausencias de Javi, Wino, Zucho y Rodri. Para poder completar el cinco inicial, el escuadrón esmeralda recurrió a Emi, que supo jugar para el verde allá por el lejano Clausura 2003. Sobre el, recayó la pesada carga de ser la única referencia ofensiva.
Frente a un equipo de buen pie, buen fútbol y, sobre todo, aire para correrlas todas, Manzi sostuvo su ilusión de discutir el pleito, mientras duraron las pilas. Sin ejercer dominio territorial pero preocupando mucho con las contras manejadas por Emi, el verde se las arreglo para sobrevivir al ímpetu de su rival, y estuvo cerca varias veces de ponerse arriba en el tanteador. Finalmente, el tricolor logro quebrar la paridad y, casi en un abrir y cerrar de ojos, marcar tres tantos más.
La segunda mitad del encuentro estuvo demás. Cuatro a cero abajo y sin resto físico para intentar una recuperación milagrosa, la muchachada manzista siguió yendo con lo poco que tenía, pero ya no volvió a generar peligro con la frecuencia que lo había hecho en los primeros veinte minutos. Por su parte, los chiquilines de Pompeya, se divertían y aprovechaban los espacios y errores de la defensa verde para terminar cerrando el calamitoso 1-8 final.
Aunque todavía queda mucho para el cierre del campeonato, la actualidad del verde no alienta pronósticos favorables. A las bajas en el plantel, hay que sumarle la lesión de Javi, que lo dejo afuera por el resto del torneo. En dos fechas, el equipo recibió doce goles y sólo marco uno, desperdiciando dos penales a favor. Y mejor no seguir. Ahora, más que en ningún otro momento, habrá que redoblar el esfuerzo, las ganas y el compromiso para sacar a Manzi adelante.
Aguante Manzi carajo!!!