Una muy mejorada imagen mostró el viejo y glorioso Manzi F. C. en su debut ante Deportivo Curacao por la primera fecha del Torneo Centenera Clausura 2014. El escuadrón esmeralda logró superar la desventaja inicial y se terminó imponiendo por 7 a 2, dejando la impresión de una notable mejoría respecto a la espantosa versión que presento en el cierre del campeonato anterior.
Los primeros instantes del match mostraron a los de verde en su clásica postura de apostar a la contra y a los de celeste con el dominio del balón, pero lejos de generar riesgo real. El breve round de estudio se rompió con el gol de Curacao, tras una buena maniobra que desembocó en un tremendo zapatazo que se coló en el primer palo del golero manzista.
En plan de buscar la igualdad, Manzi no desesperó. Intento construir juego desde abajo, con paciencia, haciendo rotar la pelota para desacomodar al contrincante y generar los espacios que permitieran atacar con peligro. Así, pudo llegar al empate con una gran desborde de Javi por derecha, cuyo centro atrás encontró a CB con todo servido para convertir. Las señales positivas para el verde fueron en aumento tras ese gol. Con dos contras magníficas, logró ponerse tres a uno arriba para irse al descanso con una sonrisa de satisfacción.
Manzi golpeó en los momentos justos del primer tiempo y, sin ser una maravilla, se encontró con las facilidades otorgadas por un rival cansado y sin ideas en la segunda mitad del cotejo. Con inusitada efectividad, se fue alejando, estirando la diferencia en el marcador con algunos goles de gran factura colectiva, demostrando los buenos resultados que se desprenden de la generosa entrega, la explosión individual y, sobre todo, las asociaciones entre jugadores con la misma camiseta.